Pagasarri. Los paseantes de los martes

Andar para serenar la mirada y el corazón, para reconciliarse con uno y con los otros. Podría ser, sí. (Víctor Colden; Mañana me voy. Diario de una caminata por el norte de Soria; Abada Editores 2023; 59)

A los paseantes de los martes, cuando el tiempo está inestable y amenaza lluvia, siempre nos queda el estupendo recurso del Pagasari que lo tenemos al ladito de casa.

Finalmente, ayer, el agua nos respetó y la que había caído la tarde del lunes y durante la noche nos regaló pequeñas cascadas y torrenteras a lo largo del camino.

Pena que el refugio cierre los martes. También es verdad que algún día tienen que descansar.

Por arriba pastaban tranquilas las vacas de @artibaondobaserria como si nuestra presencia no fuese con ellas.

Alguna ternera joven posaba ya con naturalidad para nosotros.

Otra bonita mañana que va a la mochila de los buenos momentos después, además, de haber disfrutado en la tarde del lunes del documental La fábrica de mis padre

Querer… Víctor Colden

Quiero poder seguir calzándome las botas con la ilusión del camino. Quiero poder seguir armándome de paciencia para dar un paso tras otro, sin desesperarme por la lentitud con la que tal vez avanzo. Quiero seguir fatigándome en las subidas y sintiendo el ánimo ligero de cuando baja uno silbando una canción, los pulmones llenos de un aire fresco que perfuman jaras y retamas; quiero sentarme luego bajo un árbol y sacar de la mochila la cantimplora, las nueces, una naranja grande y mi cuaderno. (Víctor Colden; Mañana me voy. Diario de una caminata por el norte de Soria; Abada editores 2023; 18)

Casi… la belleza

Caminando solo hoy a la mañana de Igorre a Bedia

Una soledad de dos, una conversación hilada a lo largo del camino, una mirada que se comparte.

Algo le falta a la belleza cuando se disfruta a solas. (Víctor Colden; Mañana me voy. Diario de una caminata por el norte de Soria; Abada editores 2023; 99)

Embalse de Ordunte

Va a resultar que andar es esto: alternar soledad y sociedad, el silencio de cuando camina uno solo y las risas de los compañeros de jornada, a los que siempre hay que acabar diciendo adiós. (Víctor Colden; Mañana me voy. Diario de una caminata por el norte de Soria; Abada Editores 2023; 26)

Este texto de V.C. refleja bastante fielmente el andar de los paseantes de los martes. Nosotros no nos decimos adiós, sino hasta el martes que viene y mientras tanto seguimos…

Ayer los paseantes de los martes tuvimos suerte con el tiempo. El cielo nos respetó justo hasta llegar al coche que es cuando empezaron a dejarse ver unas tímidas gotas.

Paseo tranquilo y circular por el embalse de Ordunte que estaba a rebosar.

Tiempo para el café en el Urtegi en Ribota de Mena, o de Ordunte, donde alguno de los presentes había celebrado los 60 años.

La primavera va entrando, el embalse está a tope y los verdes van aumentando su gama.

Pena que M.J. no haya podido venir a última hora. Volveremos.

Miradas. Febrero 2024

Conforta saber que hay otras personas a las que les gusta caminar, aunque no tenga la menor idea de quiénes son. Ni de quiénes son ni de a dónde se dirigen, qué irán pensando, por qué caminan ni qué les duele. Somos viajeros ociosos y solitarios. Vamos de un lado a otro buscando menudencias: una puesta de sol, un muro derruido, la buena compañía de un topónimo. Buscando hablar un rato con nosotros mismos, preguntarnos: «¿Qué es de tu vida?» y tomarnos unos segundos para responder, mirándonos a los ojos como en un espejo. (Víctor Colden; Mañana me voy. Diario de una caminata por el norte de Soria; Abada Editores 2023; 92)

Mungia-Arrieta-Fruiz-Mungia

Cuando marcho por uno de estos caminos, intento imaginarme a las personas que transitaron por ellos siglos atrás. Cuánta soledad, cuántas ilusiones; cuánto vino, cuánta agua y cuánta sed; cuántas risas y amargura, cuántas historias. Es reconfortante sentirse pequeño. Sólo soy uno más. (Víctor Colden; Mañana me voy. Diario de una caminata por el norte de Soria; Abada Editores 2023; 22)

Mañanera en solitario para hacer una bonita ruta circular que saliendo de Mungia pasa por Arrieta y Fruiz para volver, pasando cerca de Gamiz, de nuevo a Mungia.

Buena mañana para andar en la que sobre el rumor del agua que acompaña en muchos momentos sólo se oían los sonidos del trinar de los pájaros, del pisar al andar y del respirar, del alegre silbar a ratos… Y, de fondo, también el silencioso pensar…

El camino más difícil es el de la conversión, un camino que lleva del estar solo a experimentar la soledad como un valor positivo. En lugar de escapar de nuestra sensación de aislamiento, tratando de olvidarla o negarla, debemos protegerla transformándola en una soledad fructífera. […] Sentirse solo es doloroso, mientras que la soledad es una condición de paz. Si nos sentimos solos nos aferramos desesperadamente a los demás; la soledad nos permite esperar a los demás en su singularidad y hacer comunidad. (Nouwen en bell hooks; todo sobre el amor; Paidós, pag. 162)

La hermandad de los caminantes.

Con cariño para los Caminantes (paseantes) de los martes y de todas aquellas personas con las que nos vamos cruzando.

Quienes pertenecen a la hermandad de los caminantes no viajan en busca de lo pintoresco, sino de ciertos humores alegres: de la esperanza y el espíritu con que la marcha comienza por la mañana, y la paz y la plenitud espiritual del descanso nocturno. (Robert Louis Stevenson en Víctor Colden; Mañana me voy. Diario de una caminata por el norte de Soria; Abada Editores 2023; 16)